Adiós ¿Recuerdas cuál fue la primera palabra que le dijiste? tal vez fue un hola, un hey, o simplemente un jajajaja... sea como sea, parece que al final de las bonitas historias o sencillamente de cualquier historia, lo que queda son los finales. Y no soy buena con las amistades de esas relaciones amorosas finales, prefiero ser nada... fue lo último que le dije y no se me olvidará ¿Y ahora qué? nada, recuerdos... eso es todo, es lo que queda, al principio, durante y al fin... silencio, risas, silencio y de nuevo risas... nervios, noches, mañanas, noches llenas de sentimientos que adormecen las mañanas, errores... Escribo y pienso hacerlo en inglés también, intenté expresarlo pero con distintas palabras en distintos idiomas pero es una insensatez darle más vueltas. Tristeza... no te la enseñan la aprendes, aprendes a dominarla, aprendes cada vez que llega a tu vida, aprendes a seguir queriendo aprender. Me encanta escribir estas cosas, parece todo tan sencillo de repente y hasta perfecto, a veces creo que las palabras son capaces de crear perfectas armonías, si es difícil entenderlo yo lo sé, pero esa es nuestra imperfección, que absurdo, los imperfectos creamos perfecciones, todo esto solo transformemoslo en reales. Observo que es impotencia todo lo que se escribe, por no poder estar haciendo eso, por no poder decírselo, por no querer aceptarlo, por no darte otro cabezazo más, por no admitirlo ya que olvidar queda demasiado lejos, que aún quieres que el antes sea tú ahora, no admitir que no se puede, es triste pero cierto.